jueves, abril 28, 2011

GUBERNA-MENTAL


Estrategia

Desarrollar espacios de comunicación entre el gobierno y la ciudadanía de modo que se difunda y retroalimente la acción gubernamental con las demandas, y opiniones de las personas.

El Estado de Chile ha de generar o adecuar un ente digital que esté condicionado para recabar el sentimiento digitalizado de los ciudadanos. Un enclave electrónico que pueda ser capaz de alentar a todo poblador (capaz de llegar a una terminal de conexión de las redes digitales e ingresar a la entelequia digitalizada), a decantar sus inquietudes.
El sistema electrónico ha de tener la capacidad de saber quien es el que solicita acceso y/o el que ya está con las autorizaciones correspondientes, para pilotar por el sitio. Monitorear sus movimientos y evaluar su desempeño.

Propender a que el gobierno, en sus diferentes reparticiones, impulse el contacto directo con la sociedad chilena a través de plataformas digitales y redes sociales, conforme al progresivo desarrollo tecnológico de la nación.

La fractura tecnológica obliga a que se erija un solo ente digital, inequívoco, para el total de la población y este sea del máximo tenor para que las capacidades del gobierno de turno y los venideros alienten, promuevan, controlen y sean los celadores del almacenamiento digital de las presentes y futuras generaciones, imbuidas en las redes digitales.

Desarrollar herramientas y mecanismos para el fortalecimiento de la sociedad civil y sus distintas formas de organización.

El gran catalizador del poderío de las naciones mundiales, se basa en su capacidad de obtener conocimiento desde sus bases poblacionales e históricas, manteniéndolas en una constante mejora. Dado aquello y la inminente situación de comunicación (digitalizada) que se está imponiendo en el mundo, es necesario que se cuente con un dispositivo de almacenamiento y manipulación de los aportes electrónicos de la población.

Promover una mayor apertura de canales de participación en la generación e implementación de políticas públicas en los ministerios y servicios públicos.

El Eº y los gobiernos de turno, necesitan de una constante nutrición tanto de asesores extranjeros, como de la población individual o colectivamente. En el caso de los primeros, estos son requeridos dadas las necesidades puntuales y por sus servicios el país incurre en la retribución, monetaria, de los servicios prestados. En el caso de la población y sus aportes, estos tendrían la misma condición de retribución (monetaria), no obstante serán sus aportes constantes y perennes los que activarían el mecanismo.
 
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